Ya desde la época del nacionalsocialismo existía una tradición de disidencia y resistencia en la familia de Katrin Eigenfeld, lo que fue determinante para su posterior postura política y de compromiso. Su abuelo, Walter Gabriel, fue uno de los cofundadores de la Iglesia Confesora, por lo que estuvo encarcelado en el campo de concentración de Dachau, desde enero de 1941 hasta diciembre de 1942.

Katrin Eigenfelds comenzó su propia actividad política en 1978. En ese entonces, le llamó la atención que, a pesar de que la RDA proclamaba oficialmente la solidaridad internacional, los refugiados chilenos, emigrados a la RDA después del golpe de Estado, sufrieran una creciente discriminación. Por iniciativa propia, se puso en contacto con ellos y se encargó de organizar acciones para reunir paquetes de ayuda y enviarlos a Chile. Esto trajo consigo que la Stasi ordenara su vigilancia y no la perdiera de vista hasta 1989.

Su siguiente campo de acción lo encontró en el ámbito público, en el trabajo con jóvenes en Halle-Neustadt, donde se fue politizando y radicalizando cada vez más. El trabajo con jóvenes que querían desvincularse del sistema le causó grandes conflictos, por un lado, con la dirección de la Iglesia y, por otro, con la Stasi. En 1983, fue detenida por preparar una marcha por la paz con ocasión del Día Mundial de la Paz. El 31 de agosto de 1983 ingresó en prisión preventiva en el llamado Roten Ochsen (Buey Rojo) de Halle, acusada de difamación al Estado. El 11 de noviembre de 1983 fue puesta en libertad, entre otras cosas, porque Martin Niemöller, el obispo Kurt Scharf, Petra Kelly y Otto Schily intercedieron por ella ante Erich Honecker y porque Amnesty International se interesó por su caso.

Después de que la Stasi desarticulase en gran medida lo logrado en su trabajo diacónico-social con los jóvenes de Halle-Neustadt, Katrin Eigenfeld encontró su nuevo campo de acción político en el trabajo con el movimiento Frauen für den Frieden (Mujeres por la Paz) en Halle. En dicho movimiento llegó a ser una de las figuras centrales y tuvo la posibilidad de vivir nuevas experiencias que le ayudaron a tomar mayor conciencia de su identidad como mujer y a emprender acciones con metas concretas, como fue el caso de Aktion Fasten für das Leben (Acción Ayuno por la Vida), Frauenklagegottesdienste (misas de protesta por los problemas de la mujer) o el apoyo a mujeres, cuyos maridos, habían sido encarcelados por haberse negado a realizar el servicio militar. En diciembre de 1986 se unió a Initiative Frieden und Menschenrechte (Iniciativa por la Paz y Derechos Humanos).

En otoño de 1989, Katrin Eigenfeld fue una de las primeras firmantes del llamamiento de Neues Forum (Nuevo Foro), lo que causó su detención en la noche del 7 de octubre de 1989. En las manifestaciones de los lunes en Halle se la veía siempre en las primeras filas y organizaba y daba los discursos iniciales. Activa en los diversos gremios, grupos de iniciativas y comités, se presentó posteriormente como candidata de Neues Forum a la Asamblea Popular y a las elecciones comunales. Desde mayo de 1990 hasta diciembre de 1994, formó parte, como representante de Neues Forum, de la fracción Bündnis 90/Grüne en el Consejo Municipal de Halle y trabajó para el Unabhängiges Umweltinstitut (Instituto Independiente de Medio Ambiente) de Halle. En 1994, se trasladó con su marido a la isla de Rügen, donde vive en la actualidad.