Contra la dictadura
El establecimiento de las dictaduras comunistas en el centro y el este de Europa genera desde un principio protestas y resistencia. Las revueltas son reprimidas mediante el uso de la violencia militar y se impiden las reformas. Hasta que, en 1989, una revolución pone fin a la dictadura del partido de Estado SED en la RDA.
En 1945, tras el fin de la II Guerra Mundial, los partidos comunistas establecen dictaduras en el ámbito de influencia de la Unión Soviética. Con ayuda de las fuerzas militares, la policía secreta y la justicia combaten cualquier protesta política. Las revueltas se reprimen con las armas, las reformas democráticas se evitan mediante la ocupación militar y se prohíbe la oposición política.
No obstante, ni la persecución, ni el encarcelamiento, ni la expatriación de algunos logran acallar las voces críticas. El proceso de decadencia política y económica provoca finalmente la caída del dominio comunista en los países del centro y el este de Europa a finales de los años 1980. En la RDA, las protestas pacíficas de una gran parte de la población conducen a la desintegración de la dictadura de partido del SED y a la democratización del país.